Divididos los profesores por la huelga
Tras más de dos meses de huelga estudiantil en el recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR) un sector de la comunidad universitaria parece desear un 'regreso a la normalidad institucional' argumentando que su rol y necesidades como grupo son distintas a las de los estudiantes.
La más visible de esas expresiones viene de parte del profesor de historia Carlos Pabón, quien publicó recientemente una columna en la revista cibernética '80 Grados'.
'Los docentes debemos ser capaces de actuar autónomamente aunque esto pueda significar en ocasiones entrar en contradicciones y tener diferendos con otros sectores universitarios,' señala Pabón en su columna.
'Fungir como docentes supone reconocer que somos un sector diferente a los estudiantes, un sector vulnerable, que no puede supeditar su política, reclamos y estrategias a la de los sectores estudiantiles…', continúa diciendo Pabón.
Los señalamientos del profesor parecen recoger el sentir de un sector significativo del claustro riopedrense, y así lo reconoce el profesor Rafael Bernabe.
'Es innegable que existe un grupo de profesores que plantean el regreso a los salones de clases y a la normalidad que supuestamente existía antes de este proceso huelgario. Pero las razones que expresan son principalmente de carácter laboral, de condiciones de trabajo', señaló Bernabe.
Bernabe reconoció que desde el salón de clases se pueden adelantar muchas causas, no obstante, recalcó que 'desde el salón de clases no se puede cambiar una goma'.
'Si te cambian las condiciones de trabajo, te reducen tus beneficios y violan tus derechos; vas a reclamar tus derechos desde el salón? Dando clases?', cuestionó Bernabe.
Sobre este particular parece estar apoyada la postura de Pabón, quien parece responsabilizar al proceso huelgario de la pérdida de varios de los beneficios y derechos del profesorado.
'Ya hemos perdido demasiado en esta coyuntura por no haber sido capaces de hacerlo [actuar como docentes] (eliminación de profesores por contrato, congelación de plazas y ascensos, eliminación de sabáticas y descargas, reducción de ofrecimientos académicos, programas académicos en pausa, degradación de nuestras condiciones de enseñanza e investigación, entre otros asuntos)', sañala Pabón en su columna.
Pero el profesor de Ciencias Sociales Federico Fernández puntualizó que la situación laboral que afecta al profesorado no es una consecuencia de la huelga estudiantil o de la cuota especial de $800.
Sin embargo, profesores en distintas facultades parecen considerar que desde el salón de clases se puede generar la acción que obligue a la administración universitaria a tomarlos en cuenta al momento de establecer las políticas laborales, educativas y otras. Tal es el caso de la Facultad de Derecho, en donde se aprobó una resolución recientemente instando a 'reivindicar el espacio universitario' desde los salones de clases.
Un grupo de profesores de la facultad de Ciencias Sociales también aprobó el lunes una resolución similar para ser presentada ante sus colegas en una reunión de facultad el miércoles.
El decano de Ciencias Sociales, el profesor Carlos Severino, reconoció también la existencia de este grupo de profesores y estimó que pueden ser un sector mayoritario en el recinto.
'Eso no significa que no haya profesores que apoyen la gestión de los estudiantes, sino que existe un grupo que difiere en términos de su apoyo los estudiantes', señaló Severino.
'Ese grupo tampoco es monolítico. Y si bien puede ser mayoritario, es una mayoría muy débil, con muchas fisuras', explicó el decano.
Por otro lado, existen quienes consideran que los señalamientos de Pabón son 'mero oportunismo intelectual'.
'El profesor Pabón nunca se ha insertado en los organismos profesionales y ha optado por actuar desde la periferia insertándose en la discusión solo en momentos de crisis. Eso es mero oportunismo intelectual', señaló un profesor de la Escuela de Comunicación Pública que prefirió no identificarse.
El liderato estudiantil por su parte, ha reiterado que la inserción de los distintos componentes de la comunidad universitaria en el debate sobre cuál debe ser el rumbo a seguir en el desarrollo de la institución fortalece a la universidad.